No son muchas las cosas de los 70´s de las que tengo memoria. Tal vez porque uno clasifica los recuerdos, deja los bacanes y borra los que duelen, por eso yo no dejé tantos en este disco duro mío, del que he debido borrar muchas cosas para guardar otras, claro, por falta de espacio. Los 70´s para mi estuvieron marcados por el golpe militar, el descubrimiento de la música rock, la enfermedad terminal de mi madre y por las grandes alegrías que me dio el cine, pasión que viví desde muy chica y que tuvo su máxima expresión el día que fui a ver Star Wars o La Guerra de las Galaxias, como la llamábamos en esa época. Star Wars es y será mi película favorita de todos los tiempos y digo película y no saga porque para mí son una sola, una historia, un todo. Y si, debo decirlo, la más perfecta historia jamás contada en el cine.
Es desde ese amor infinito que escribo estas palabras sobre el Episodio VIII Star Wars: The Last Jedi, no desde la crítica, no desde la objetividad (que muy pocas veces se tiene en todo caso). Mucho se ha dicho que los verdaderos fans no deberían gustar de las películas de la era Disney, porque son distintas, porque no tienen la frescura, porque los personajes no tienen el carisma, etc. Bueno, a mí no me pasa nada de eso, no odio las precuelas, ni tampoco odié The Force Awakens, en mi caso agradezco que me hayan contado, bien o mal, los inicios de la Rebelión y ahora agradezco saber que ha pasado con mis personajes favoritos y con quienes están tomando su lugar. No me siento “dueña” de SW ni compro todo lo que me presenta (jamás perdonaré a Lucas por Hayden Christensen) y sí creo que si las secuelas siguen, como se especula, tal vez llegará el día en que ya no me gusten las películas, porque en algún momento dejará de ser Star Wars y pasará a tratarse de personas y lugares que no tienen nada que ver con este universo extraordinario. Pero créanme que eso pasará cuando sienta que ya se acabó la magia de La Fuerza, la valentía de la Rebelión o Resistencia y la maldad del Imperio o la Primera Orden como se llaman ahora.
El Episodio VIII Star Wars The Last Jedi comienza donde quedó The Force Awakens, con una Nueva Orden muy empoderada, a quién no le hizo mucha mella la destrucción de la Base Starkiller, lista para exterminar de una vez todo lo que tenga que ver con la Resistencia y una Rey entregándole el lightsaber al Maestro Luke, en aquella lejana y perdida isla.
En esta entrega los personajes emblemáticos son el alma y corazón de la historia y los de recambio le dan vida y energía y también la mística que tanto echábamos de menos. Si bien hay un par de escenas que podrían no estar, hay otras que te dejan sin aliento. The Last Jedi tiene mucho de lo que nos da tanta nostalgia de la saga original, como las sorpresas y giros, como las batallas que son épicas y que te cautivan y, por sobre todo, La Fuerza como la energía que une todo.
The Last jedi es una película que se soporta a sí misma, aunque no hayas visto The Force Awakens, o ninguna de las anteriores, igual será una experiencia completa, porque te habla y te sugiere las mismas cosas que la saga original, tiene sus propios héroes y villanos, bien construídos y muy bien presentados, tiene una dosis de humor adecuada y bien usada. Si eres de esos fans acérrimos de la saga, de los que odiaron TFA, esta película te devolverá a la vida y te dejará esperando por más, pesar de las fallas, de las penas y de las pérdidas. Por último aceptémoslo, nada de lo que se haga ahora podrá igualar la maestría de la trilogía original, no habrá más A New Hope y menos habrá un Empire Strikes Back, la más perfecta de todas, ni habrá más Return of the Jedi. Ya no tendremos criaturas entrañables como los Ewoks ni villanos perfectos, porque un personaje como Vader se puede crear una sola vez en la historia. Pero no podemos negar que hay un intento de recrear la mística, aquello de lo que nos enamoramos todos, así que recibamos estas entregas con los brazos abiertos, aunque critiquemos, dejemos que nos encanten y nos emocionen con todo lo nuevo que estas historias traen, porque después de todo, si no es por nosotros los millones de fans, estas películas jamás hubieran existido.
Yo por mi parte agradezco cada nueva entrega, la disfruto y a esperar la próxima; quién sabe hasta cuando y hasta donde, después de todo, si 40 años después de haber visto la película de mi vida, otra película del 2017 me entrega la mitad de las emociones y de las sorpresas que me entregó Star Wars y además se convierte en la película póstuma de nuestra amada princesa, me siento más que pagada.
Director: Rian Johnson
Escritores: Rian Johnson, George Lucas (basado en los personajes creados por él)
Protagonistas: Daisy Ridley, John Boyega, Mark Hamill , Carrie Fisher
Por Marisa Zúñiga